APTITUD DEL SUELO PARA CULTIVO DE MANGO VALLENATO EN GUACOCHE, DEPARTAMENTO DEL CESAR
FITNESS OF A SOIL FOR GROWING VALLENATO MANGO IN GUACOCHE, CESAR STATE
Ricardo Durán*[1] , Aída L. Villa [2] y María T. Flórez[3]
Recibido para publicación: Enero 15 de 2014 - Aceptado para publicación: Marzo 26 de 2014
Se evaluó la aptitud del suelo de la Finca “La Estancia” ubicada en Guacoche, departamento del Cesar, para el cultivo de mango (Mangifera indica L.) variedad Vallenato. Se muestreó una hectárea de suelo con 16 calicatas para definir el perfil modal del suelo y describir sus propiedades. Se tomaron muestras disturbadas y no disturbadas de cada horizonte para análisis fisicoquímico según Manual No. 47 del Instituto Colombiano Agropecuario y la metodología establecida por el Instituto Geográfico Agustín Codazzi (IGAC). El suelo fue clasificado como un Typic Dystrustepts, arenoso franco mixto isohipertérmico, de mediana fertilidad, según Claves de Taxonomía de Suelos de los Estados Unidos. El suelo no tiene limitaciones por sales, sodio o aluminio; localmente presentan niveles freáticos altos que pueden ocasionar pudrición de la raíz y facilitar la pérdida de fertilizantes con aplicación edáfica.
PALABRAS CLAVES:suelo, mango vallenato, Typic Dystrustepts, cultivo, aptitud
The ability of the "La Estancia" farm soil in Guacoche, Cesar state, for growing Vallenato mango (Mangifera indica L.) was evaluated. One hectare of soil was sampled with 16 pits to define the modal soil profile and describe its properties. Physicochemical analysis were carried out to disturbed and not disturbed samples from each horizon under the methodology reported in the Manual No. 47 del Instituto Colombiano Agropecuario and the methodology established by the Agustín Codazzi Geographical Institute (ACGI). According to the properties and the guide of Keys to Soil Taxonomy de los Estados Unidos, the soil was classified as a Typic Dystrustepts, sandy loam mixed isohyperthermic, of medium fertility., The soil does not have limitation for salts, sodium, or aluminum; locally the soil has high water tables that can cause root rot and facilitate the loss of fertilizer with edaphic application.
KEY WORDS:Soil, mango vallenato, Typic Dystrustepts, crop, production
[1]Grupo Optimización Agroindustrial. Universidad Popular del Cesar. Campus sede Sabanas, bloque F, Lab 201. Valledupar, Colombia. Cel: 3157247875. ricardoduran@unicesar.edu.co
[2]Grupo Catálisis Ambiental, Departamento de Ingeniería Química, Facultad de Ingeniería, Universidad de Antioquia, Calle 70 No. 52-21, Medellín, Colombia, aida.villa@udea.edu.co,
[3]Grupo de Investigación GAIA, Facultad de Ingeniería, Universidad de Antioquia, Cra. 53 No. 61-30 SIU-UdeA. Torre II, Lab. 230, Medellín, Colombia, maria.florez@udea.edu.co
El mango es una de las frutas que más se producen en las áreas tropicales y subtropicales del mundo y por ende de las más consumidas, especialmente por el interés del consumidor de ingerir alimentos más saludables y frescos (FAO 2014). De acuerdo con cifras de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO 2014), la producción mundial de mango representa aproximadamente el 36% del monto mundial de frutas tropicales, con un crecimiento anual del 1,76%. A nivel mundial, se producen aproximadamente 36,3 millones de toneladas por año de mango (4,9 millones de hectáreas), distribuidas en Asia (79%), América (13%), África, Europa y Oceanía (8%) (CCI 2009).
El comercio internacional, prevé un aumento de 1.559 millones de dólares en 2014 a 1.798 millones de dólares en 2029; por lo tanto, se proyecta en Colombia que de 18.573 ha de mango sembrada en el 2011 se pase a 40.000 en el 2020 para una producción de 266.693 t. (Plan de Fomento Hortofrutícola 2006). El departamento del Cesar, identificado como región potencial para la producción del mango (Programa de Transformación Productiva 2013) tiene un total de 949 ha de mango en cultivos, con una producción de 16.575 t y un rendimiento de 17,5 t ha-1 (CCI 2011), correspondiendo más del 50% a mango Vallenato, el cual es originario de Colombia, específicamente del departamento del Cesar, en honor a los habitantes de la ciudad de Valledupar y a la música característica de esta región (Fernández y Reales 2011).
El árbol del mango Vallenato es grande y produce muy buena floración en latitudes tropicales y subtropicales. El fruto tiene forma oval con un pequeño pico, con longitud de 8 a 10 cm, ancho de 7,5 a 8,5 cm y la piel es de espesor medio. El peso varía de 175 a 350 g, con un promedio de 250 g, el peso de la piel y la semilla varía de 16 a 24 g. Tiene color rojo luminoso con un color amarillo tierra en el momento de cosecha. La piel es lisa y resistente a la abrasión, con textura muy firme. La pulpa es de color amarillo-naranja con un sabor dulce, picante, firme y casi libre de fibra. La fruta es resistente a la enfermedad antracnosis y tiene excelentes características para precosecha y poscosecha. Su principal defecto es que es una fruta pequeña (CENICAFÉ y SENA 2001).
El mango se puede adaptar en alto grado a diversas condiciones edáficas y de fertilidad; sin embargo, aunque es tolerante a los suelos de baja fertilidad, sus niveles de producción se elevan sustancialmente en suelos fértiles (Avilán et al. 1998; Centa 2002).
El objetivo de este trabajo es conocer la aptitud del suelo para el establecimiento del cultivo de mango vallenato en la finca "La Estancia".
El estudio se realizó en un suelo cultivado con mango en el departamento del Cesar, municipio de Valledupar, corregimiento Guacoche, finca “La Estancia” (Coordenadas planas: N 1.094.432 – W 1.652.041). Se muestreó una hectárea de suelo utilizando una malla o cuadricula de 20 m x 20 m, eliminando los bordes, para evitar interferencias en el muestreo para un total de 16 puntos. En una calicata modal se describieron las propiedades físicas del suelo, en forma detallada los perfiles del suelo y se definió el perfil modal con sus respectivas propiedades diagnósticas. De cada horizonte se tomó 1 kg de suelo disturbadas y no disturbadas (en cilindro de 30 cm y 4 cm de diámetro), ambas fueron guardadas en bolsas plásticas con cierre hermético, para análisis fisicoquímicos de cada uno de los horizontes. El cilindro se cortó a lo largo en dos, una mitad se guardó como testigo y la otra mitad se utilizó para describir los perfiles con mayor detalle. El suelo se clasificó con base en la Key Taxonomy del 2010 y se comparó con el indicado en el estudio general de suelos levantado en la Sierra Nevada de Santa Marta por el IGAC (1986).
En cada horizonte se describió el espesor, color, textura, profundidad efectiva, presencia de líticos, estructura,
pegajosidad, plasticidad, bioturbación, presencia y tipo de raíces y organismos (Tabla 1). Con las muestras disturbadas y
secadas al aire, se evaluó la textura, pH, conductividad eléctrica, materia orgánica, fósforo (P) disponible, bases totales (
Ca, K, Mg y Na) aluminio intercambiable y los elementos menores: Fe, Cu, Mn, Zn, B. Se siguió la metodología establecida por
el Instituto Geográfico Agustín Codazzi (IGAC 1990) y el Manual No. 47 del Instituto Colombiano Agropecuario (ICA 1989).
Los análisis se realizaron por triplicado, realizando promedio aritmético y desviación estándar para el primer horizonte. La
evaluación de la aptitud se realizó teniendo en cuenta aspectos relacionados con el suelo (textura, profundidad efectiva,
porcentaje de saturación, pedregosidad, pendiente, minerales, pH y materia orgánica), con el crecimiento de las plantas (
disponibilidad de nutrientes, calidad del sistema radicular y disponibilidad del agua) y con pérdida de la capacidad (erosión
eólica,hídrica y lixiviación) (Delgado y Sánchez 1987; Oviedo et al. 2012).
Este un suelo con una pendiente menor del 3%, ubicado en la margen izquierda del rio Guatapuri, tiene características de
régimen de humedad ústico, régimen de temperatura isohipertérmico superior a 30 °C, un epipedón ócrico, con contenidos de
materia orgánica menor a 1%, material parental proveniente de sedimentos aluviales, un endopedón cámbico, presencia de
horizontes franco arenosos; mineralogía mixta; con altos contenidos de bases, el cual se clasificó como Typic Dystrustepts
arenoso franco mixto isohipertérmico, asociación Guacoche - “La Estancia”, (USDA 2010) diferente a lo encontrado por el
estudio de suelos del Instituto Agustín Codazzi, IGAC (1986), a escala de 1:100.000, que clasifica este suelo dentro de la
Asociación Guatapurí, conjunto Guatapurí, como Typic Haplaquoll, poco desarrollado, superficial, limitado por drenaje natural
pobre, nivel freático alto y encharcamiento, presencia de cantos rodados y bajo contenido de fósforo y potasio, localizados
en el valle del río Guatapurí, a menos de 300 msnm, con clima cálido seco con relieve plano surcado por muchos cauces y
arroyos, con problemas de inundación en épocas de lluvia.
Posiblemente debido a cambios introducidos por el uso intensivo con cultivos de arroz y frutales, cambios en los parámetros de clasificación relacionados con el régimen de humedad y temperatura del suelo (régimen de humedad ústico y régimen de temperatura isohipertérmico) y el nivel de detalle o de escala utilizada.
El análisis de las propiedades químicas (Tabla 2), indica que este suelo es neutro con pH promedio de 7,2 ± 0,9 con algunos puntos de muestreo superiores a 8 y no existe presencia de aluminio intercambiable. La materia orgánica (M.O.) es baja entre 0,57 y 1,14%; los valores de fósforo disponible varían entre 28,7 y 160,7 mg kg-1, que corresponden a valores entre medios a muy altos, y los de potasio son medios entre 0,25 ± 0,1 cmol kg-1, requiriendo la suplementación nutricional con nitrógeno (N), fósforo (P) y potasio (K) en algunas etapas del cultivo. No se presentan limitaciones por sodio (Na) y sales, con contenidos menores a 1 cmol kg-1 y 0,73 dS m-1 respectivamente, ya que el mango es considerado sensible a condiciones salinas, dando lugar a puntas quemadas, deformación de las hojas, y reducción de crecimiento (Durán et al. 2003, 2004). Los valores de magnesio (Mg) son bajos (0,94 ± 0,31 cmol kg-1) y los niveles de calcio (Ca) son altos (19,0 ± 7,9 cmol kg-1). Los elementos menores presentan valores altos en todos los puntos, con excepción del boro (B) disponible que se encuentra entre 0,21 y 0,22 mgkg-1, o sea niveles bajos, que puede causar problemas como la muerte del centro del crecimiento o el desarrollo lento de las raíces (Malavé 2005).
Tabla 2. Características químicas por calicata y diferentes horizontes del suelo del lote “La Estancia”En la tabla 3, se presenta el consolidado de los contenidos nutricionales del suelo en el primer horizonte. Como se evidencia, existen variaciones menores al 15% en casi todas las propiedades, con excepción de fósforo, calcio y magnesio, originado por la génesis del suelo, su interacción con las condiciones de inundación que no son homogéneas y posiblemente por la fertilización realizada en años anteriores.
Tabla 3. Propiedades químicas del suelo “La Estancia” en el primer horizonte
El suelo analizado presenta estructura en bloques subangulares, con texturas franco a franco arenosas, que permiten y facilita el desarrollo de las raíces y el transporte de agua y nutrientes. Con respecto a la extracción de nutrientes, analizando frutos en un elevado número de variedades, evidencian que el nitrógeno, el fósforo y el potasio son los elementos extraídos en mayores cantidades en una cosecha, seguido del calcio y el magnesio (Medina et al. 2014). Esto indica que el suelo en estudio requiere fertilización suplementaria, para incrementar los niveles de nitrógeno, fósforo, potasio, magnesio y boro para mejorar los niveles de producción, ya que el nitrógeno tiene gran influencia sobre el crecimiento y desarrollo del mango, como ingrediente esencial de clorofila, proteínas, hormonas, enzimas y la producción del fruto. El fósforo es importante en el crecimiento de raíces, tallos fuertes, frutas buenas y temporizador de la madurez y el potasio mejora la capacidad de la planta para soportar condiciones extremas tales como la sequía, el calor, la salinidad y las enfermedades y en la fruta influye en la coloración de la cáscara, aroma, tamaño y duración de la fruta (Ramírez y Davenport 2010).
El suelo presenta niveles freáticos muy altos que pueden ocasionar pudrición de la raíz, favorecer las enfermedades y
facilitar la pérdida de fertilizantes por lixiviación que se apliquen a nivel edáfico. Generalmente, los árboles de mangos
toleran las condiciones húmedas e inundaciones; no obstante, la respuesta es variable entre los árboles. (García et al.
2009). Los síntomas del estrés causado por las inundaciones incluyen desecación y marchitez de las hojas, muerte progresiva y
crecimiento reducido. Las condiciones ambientales previas y actuales así como el tamaño y salud de los árboles afectarán la
respuesta de los mismos a las condiciones húmedas (Centa 2002).
Este suelo no presenta limitaciones con respecto a las variables agroecológicas óptimas para la producción de mango, pues se
encuentra a una altitud de 200 msnm; temperatura de 28,8 °C; precipitación de 1000 mm/año; vientos de 1,2‑2,5 km h-1; pH de
7,2 ± 0,9; textura franco arenosa, porcentaje de sodio intercambiable de 2,1-5,2; no presenta aluminio; y los valores óptimos
según (Avilán 1998) son altitud hasta 800 msnm; temperatura entre 26‑32 °C; precipitación entre 1000-1500 mm/año; vientos
menores de 20 km h-1; pH neutro; textura arenosa hasta franco, porcentaje de sodio intercambiable hasta 15 y saturación de
aluminio hasta 30.
En ciertas edades del cultivo, requeriría riego complementario en periodos de sequia (Mora et al. 2002), necesidad de drenajes para disminuir la lixiviación de nutrientes o la pudrición de raíces y suplemento nutricional en ciertas edades del cultivo.
El suelo es apto para el cultivo de mango vallenato, no presenta limitaciones por sales, sodio o aluminio pero si presenta
limitaciones por niveles freáticos altos, en algunos sectores, que pudieran ocasionar la pudrición de la raíz y facilitar la
pérdida de fertilizantes con aplicación edáfica, se hace necesario el riego complementario en periodos de sequia en ciertas
edades del cultivo.
El suelo presenta las condiciones agrológicas y ambientales requeridas para el cultivo de mango Vallenato, pero podría tener
limitaciones por pH en algunos puntos de muestreo y necesidad de fertilización suplementaria para incrementar los niveles de
producción.
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